Vicente Tena Fuster, nacido en Valencia en 1861 y fallecido en 1946, pertenece a la escuela valenciana de escultura que tuvo su apogeo en el primer tercio del Novecientos. Se conoce que Vicente Tena Fuster, se formó en el taller del escultor valenciano Modesto Pastor Julià, que fue profesor de dibujo y escultura en la Escuela de Bellas Artes de San Carlos, y además tenía un importante taller en la calle de La Amargura de la Ciudad del Turia, que mantuvo abierto hasta su fallecimiento acaecido en 1904. Después de su formación Vicente Tena abrió un taller propio en la denominada calle Danzas número 9 de Valencia, junto a la Iglesia de la Compañía de Jesús, en el céntrico Barrio del Mercat, donde se encontraba trabajando en 1893; y posteriormente trasladó su taller enfrente del Colegio de la Congregación de Jesús-María, situado en la Avenida de Fernando el Católico. El tiempo que abarca su actividad artística conocida (1893-1925) nos demuestra que debió ser coetáneo de Mariano Benlliure Gil (1862-1947), excelente
artista seguidor del naturalismo de Rodin. En este taller a su vez se formarán una nueva generación de escultores como por ejemplo Rafael Grafíá Jornet.
Vicente Tena se anunciaba regularmente en la prensa escrita de la época (se conocen anuncios en “El Faro de Vigo” en 1902, “El Comercio” en 1919, en la revista semanal “La lectura dominical” en 1902, etc) y en los catálogos ilustrados, donde mostraba su taller, su oferta artística, sus obras y la forma de adquisición, siendo un sistema de venta innovador para aquella época, importado de los Estados Unidos, que le permitió dar a conocer su taller y su obra por toda la geografía española y extranjera.
Se conserva un Catálogo ilustrado de 40 páginas del taller del escultor valenciano de la primera o segunda década del siglo XX. En su catálogo aparece el anverso y reverso de la medalla conmemorativa de la Exposición Regional de Lugo de 1896, lo que nos lleva a pensar que participó en ella. El mencionado catálogo comienza con una curiosa fotografía con una vista del taller con más de una veintena de hombres entre oficiales y aprendices, siendo de un gran tamaño para la época. Le sigue una detallada tarifa de precios dividida en Imágenes esculpidas en madera; Imágenes para vestir, Crucifijos esculpidos en madera; Niños con ropajes tallados, desnudos para vestir, o con alas para nubes; Cabezas de serafines, y termina con el precio de los embalajes, todo ello dividido por dimensiones en centímetros y clases, pudiendo ser de 2.ª, 1.ª o "extra". Sigue con diversos apartados como: Condiciones y aclaraciones importantes; Secciones de coronas; Pelucas de seda; Tulipas; Talla y adorno; y termina con la Sección de escultura. Tenía un elevado nivel de especialización, ya que controlaba todo el proceso artístico en la realización de imágenes: dibujaba bocetos, elegía y tallaba la madera, y finalmente se encargaba del encarnado y decorado, textualmente se cita en su página sexta: “Se remitirán dibujos y fotografías con detallada explicación de lo que la Casa se compromete a construir en la cantidad que se designe. Esta es la primera Casa en Valencia que además del estudio de Escultura, instaló los talleres de decorados y encarnado, talla de adorno y carpintería en el mismo establecimiento”. El catálogo incluía su número de teléfono y dirección, por lo que hemos de suponer que contactar con él no era difícil, además de ser un profesional que se amoldaba a las exigencias artísticas y económicas de los clientes.
Sabemos que empleaba “madera de pino rojo de Flandes” para las grandes tallas, ya que según él “daba un excelente resultado”, empleaba el peral y el ciprés para encargos “más pequeños” y utilizaba el cedro “para imágenes con destino a países con clima cálido y húmedo y para altares”. Debe tenerse en cuenta, el énfasis que ponía la calidad en los materiales y acabado de las esculturas que realizaba, dando un trato personalizado al cliente en la realización de la obra encargada, garantizando incluso su reembolso si no le satisfacía.
El historiador Fernando Mósig Pérez clasifica la obra de Vicente Tena Fuster en tres períodos:
Período sanfernandino o de juventud (1893-1901):
Se ha dicho que Tena cumplía en San Fernando el servicio militar en la Marina de Guerra y que llegó de algún modo a trabar conocimiento con miembros de la junta de gobierno de la Hermandad de Columna, en la que fue nombrado Hermano Protector y para la que talló siete obras:
-El Señor de la Columna y dos Sayones Flagelíferos (1893)
-San Pedro Apóstol (1895)
-Sagrado Corazón de Jesús (1898)
-Ntra. Sra. de las Lágrimas (1899)
-Niño Jesús de Praga (1901)
En San Fernando, realizó también las tres Marías de la Cofradía de la Vera Cruz y las imágenes de María Cleofás y María Salomé para la Cofradía del Cristo de la Expiración.
De este período son también las figuras de un Nacimiento para la iglesia conventual del Carmen de Jerez de la Frontera y un Ecce Homo, Pilatos y un sayón para la misma ciudad realizados en 1892.
Período sevillano (1895-1906):
Después de sus obras para San Fernando y Jerez, Vicente Tena se mostró muy activo en localidades sevillanas. Trabajó para Osuna durante cuatros años (1901-1904), incluso puede que residiera allí durante esa temporada. Las obras de este período son:
-Fernando III El Santo, Parroquia de la Magdalena, Dos Hermanas (1895)
-Pastores para un belén napolitano, Iglesia del Carmen, Dos Hermanas (1905)
-Ntra. Sra. de la Esperanza y San Juan Evangelista, Cofradía de la Vera Cruz, Osuna (1901)
-“Paso de los Perritos” para Ntra. Sra. de la Esperanza (1904-06)
-Virgen del Mayor Dolor, Cofradía de la Pax, Osuna (principios s. XX, 1914-1915)
-San José, Iglesia del Convento del Carmen, Osuna
-Simón de Cirene, Hdad de Jesús Nazareno, Estepa (1904)
-Virgen de la Piedad y San Juan Evangelista, Hdad del Dulce Nombre, Marchena (1905)
Período castellano (ca. 1910-1925):
En los años siguientes, tenemos algunas noticias más, aunque siempre esporádicas, de la actividad escultórica de Vicente Tena en tierras castellanas, extremeñas y de nuevo andaluzas. En efecto, como veremos, Tena volvió a extender sus tentáculos en Andalucía en la década de 1920, o tal vez nunca dejó de tener encargos en esta ardiente región tan cofrade. En esta época el escultor valenciano contaría con 50 o 60 años. Las obras de este período son:
-Jesús de la Desnudez, un romano y dos sallones, Medina de Rioseco, Valladolid (1910)
-Santiago Apóstol sobre una esfera terrestre, Lorquí, Murcia (1912). Destruido en la Guerra Civil.
-San José, Iglesia de San Miguel, Villalón de Campos, Murcia (1913)
-Ecce Homo, Museo de Jódar, Jaen (1918)
-San Juan Evangelista, Cofradía de la Misericordia, Lepe, Huelva.
-Virgen de los Dolores, Hdad. del Calvario y Jesús Nazareno, Mérida, Badajoz, restaurada en 1925 por Vicente Tena
-Jesús Nazareno, Cofradía de la Humildad, Barbate (1926-27)
-Pastores de un Belén para la Iglesia del Carmen, Arjona, Jaén. Destruido en 1936
-Paso del Beso de Judas, Cofradía de la Santa Vera Cruz, Cáceres (1934). Perteneciente a su taller.
Tras un paréntesis de más de una década, volvemos a tener noticias de la actividad escultórica de un Vicente Tena a partir de la posguerra. Pero se trata de Vicente Tena Cuesta (1904-1996), nacido en Jávea (Valencia), artista que estuvo muy activo en las décadas de 1940 y 1950, alcanzando la cima de su arte al promediar el siglo XX. Recibió el Premio Nacional de Escultura en 1950 y se le dedicó un colegio público en su ciudad natal. Vicente Tena Cuesta era hijo de nuestro imaginero, ingresó en la escuela superior de Bellas Artes de San Carlos de Valencia y compatibilizó sus estudios con su trabajo de aprendiz en el taller familiar, haciéndose cargo del mismo en 1939. Su taller estuvo primero en la calle de Fresquet y después en la de la Encarnación. La actividad del taller se truncó en el año 1957 con una devastadora riada que acaeció ese año en Valencia y que acabó con gran parte del local, destruyendo la mayoría del material que allí se encontraba. Trabajó primordialmente en localidades valencianas y manchegas. De su obra destacan sus Cristos Yacentes (Benifayó, Manises y Villarrobledo), el Cristo de los Afligidos de Ribarroja de Turia, Jesús Nazareno de El Bonillo, Jesús Nazareno y Ntra. Sra. de la Soledad de Membrilla, Jesús Cautivo de la Puebla de Cazalla y el Cristo de la Columna de Almaguer.
Fuente:
-Vicente Tena, Fernando Mósig Pérez, Isla Pasión
-Vicente Tena Fuster, obra artística. Hermandad de la Desnudez
-Vicente Tena Fuster, escultor de la desnudez. Hermandad de la Desnudez
-Vicente Tena y las cofradías de Expiración y Vera Cruz, Fernando Mósig Pérez, Isla Pasión
-Vicente Tena, autor del misterio del Ecce Homo. FA García Romero y EJ Vega Geán. Diario de Jérez. 2009
-Vicente Tena Cuesta en Membrilla. Miciudadreal.es. 2015
-75 aniversario en Membrilla. Membrilla.com. 2015
-Nueva publicación sobre la obra de Vicente Tena en Osuna. La Hornacina, 2022
-Jesús Nazareno restaura su imagen del Cirineo. Devociones de Estepa, 2023