San Jerónimo es uno de los grandes desconocidos del municipio a pesar de ser el antiguo patrón del "Concejo de la Villa", institución que equivaldría al actual Ayuntamiento. Su nombramiento como patrón data de 1577 cuando el Cabildo de la Villa de Estepa lo eligió para que los protegiera en un sorteo a suertes. D. Antonio Aguilar y Cano, autor del Memorial Ostipense en 1886, encontró una hoja en el libro capitular del año 1577 donde D. Juan de Arrieta, corregidor del estado, daba nota de cómo se produjeron los hechos de este nombramiento. Esta hoja se encontraba con numerosas lagunas y letras ilegibles que Aguilar y Cano respetó al transcribirlo a su obra, pero que se podía leer y comprender a pesar de la falta de sintaxis y cohesión. Nuestra intención ha sido intentar completar esas lagunas para dar lugar a un texto legible de forma sintáctica sin añadir ninguna información nueva.
“S. Gerónimo Patrón del Ayuntamiento, Año de 1577.
Los aquí presentes en la Villa de Estepa en la fecha de treinta días del mes de septiembre del año mil quinientos setenta y siete - en el nombre de Dios todopoderoso, padre e hijo y espíritu santo, tres y una esencia divina - se juntaron en el cabildo los miembros del Ilustre Concejo, Justicia y Regimiento, Cris(-) Sánchez Pleitez, alcalde ordinario, y los regidores Francisco de Torres Pineda, Antonio de Navarrete, Alonso de Vergara, Juan Caballero, … de Llamas, Antón Gallego, Juan Martín Carnerero, según conviene a saber el Licenciado de los Olmos, corregidor de este estado, y acordaron lo siguiente:
En este cabildo se acordó por cuánto es justo que este cabildo tenga un abogado santo que interceda con Nuestro Señor Dios para que a su servicio convenga en los negocios de la gobernación de la Villa de Estepa y de su término; se acordó que se metan en suerte los doce apóstoles de Nuestro Sr. Jesucristo y con ellos el bienaventurado S. Gerónimo y San Juan Bautista.
Celebrada y sacada la suerte al santo que le cayese se celebraría vísperas y misa con su procesión, sermón y se citaría a los oficiales del cabildo para aquel día; y todo los oficiales del cabildo serán obligados a ir a aquellos días a la celebración, corregidos so pena de tres reales al que faltare para la celebración a cargo del cabildo, so dicha pena sea obligado el día antes, y para que el dicho día se puedan traer trompetas y chirimías.
Y luego se pusieron catorce cédulas de los doce apóstoles, de San Juan Bautista y del Sr. S. Gerónimo, y otras catorce, trece de ellas en blanco y una que decía “fiesta”; y las echaron en dos vasijas de poca edad, de hasta cuatro años poco más o menos; las cédulas de los santos en una y en la otra vasija las otras. Se sacó la primera cédula y fue en blanco, y luego se sacó a S. Pedro. Se sacó al señor S. Gerónimo y sacó con él la cédula que lo nombraba por abogado en de aquí adelante.
En consecuencia, se acordó que se estime todo lo necesario para que haya la festividad y se envíe por música a Osuna o Écija y que se pregone públicamente que ninguna persona se siente en los escaños del cabildo en la iglesia como no sea oficial del Cabildo en los días de fiesta mientras se celebran los oficios divinos so pena de 600 ms. aplicados para el gasto de las fiesta del señor S. Gerónimo.
El Licdo. de los Olmos, Juan de Arrieta, escribano.”
“S. Gerónimo Patrón del Ayuntamiento, Año de 1577.
Los aquí presentes en la Villa de Estepa en la fecha de treinta días del mes de septiembre del año mil quinientos setenta y siete - en el nombre de Dios todopoderoso, padre e hijo y espíritu santo, tres y una esencia divina - se juntaron en el cabildo los miembros del Ilustre Concejo, Justicia y Regimiento, Cris(-) Sánchez Pleitez, alcalde ordinario, y los regidores Francisco de Torres Pineda, Antonio de Navarrete, Alonso de Vergara, Juan Caballero, … de Llamas, Antón Gallego, Juan Martín Carnerero, según conviene a saber el Licenciado de los Olmos, corregidor de este estado, y acordaron lo siguiente:
En este cabildo se acordó por cuánto es justo que este cabildo tenga un abogado santo que interceda con Nuestro Señor Dios para que a su servicio convenga en los negocios de la gobernación de la Villa de Estepa y de su término; se acordó que se metan en suerte los doce apóstoles de Nuestro Sr. Jesucristo y con ellos el bienaventurado S. Gerónimo y San Juan Bautista.
Celebrada y sacada la suerte al santo que le cayese se celebraría vísperas y misa con su procesión, sermón y se citaría a los oficiales del cabildo para aquel día; y todo los oficiales del cabildo serán obligados a ir a aquellos días a la celebración, corregidos so pena de tres reales al que faltare para la celebración a cargo del cabildo, so dicha pena sea obligado el día antes, y para que el dicho día se puedan traer trompetas y chirimías.
Y luego se pusieron catorce cédulas de los doce apóstoles, de San Juan Bautista y del Sr. S. Gerónimo, y otras catorce, trece de ellas en blanco y una que decía “fiesta”; y las echaron en dos vasijas de poca edad, de hasta cuatro años poco más o menos; las cédulas de los santos en una y en la otra vasija las otras. Se sacó la primera cédula y fue en blanco, y luego se sacó a S. Pedro. Se sacó al señor S. Gerónimo y sacó con él la cédula que lo nombraba por abogado en de aquí adelante.
En consecuencia, se acordó que se estime todo lo necesario para que haya la festividad y se envíe por música a Osuna o Écija y que se pregone públicamente que ninguna persona se siente en los escaños del cabildo en la iglesia como no sea oficial del Cabildo en los días de fiesta mientras se celebran los oficios divinos so pena de 600 ms. aplicados para el gasto de las fiesta del señor S. Gerónimo.
El Licdo. de los Olmos, Juan de Arrieta, escribano.”
En primer lugar, destacar que el sorteo fue para nombrar a un patrón para el "Concejo de la Villa", pero no patrona de la villa ya que Santa María de la Asunción había sido nombrada protectora de la villa tras la conquista el 15 de Agosto de 1240 por Fernando III, el Santo; ni para elegir patrón de la villa porque recientemente se ha reconocido que Santiago Apóstol había sido nombrado patrón del Castillo, Villa y Ciudad de Estepa desde el 24 de Septiembre de 1267.
Sobre dicho sorteo, nos ha llamado especialmente la atención los santos que los miembros del Cabildo de la Villa de Estepa eligieron en 1577. Por un lado los doces apóstoles y por el otro San Juan Bautista y San Jerónimo. Los doce apóstoles serían incluidos posiblemente por ser los elegidos para acompañar a Jesucristo. San Juan Bautista pudo haber sido elegido por una especial devoción de la villa a este santo ya que se tiene constancia de la construcción de la Ermita de San Juan Bautista en 1564 a costa de Juana García de Almagro. Pero el hecho de San Jerónimo es quizás el más enigmático ya que no tenía la villa relación con este padre de la iglesia anterior a este sorteo; sin embargo, el día de la elección fue un 30 de Septiembre, día de San Jerónimo y de ahí su inclusión en el sorteo. Otro dato significante es por qué no se incluyo en el sorteo a San Cristóbal, cuya ermita también existía en la villa y daba nombre al promontorio o cerro dónde estaban las murallas, el castillo y la villa de Estepa; o a San Sebastián, cuya ermita también existía y ya era desde 1541 parroquia propia. Otras devociones populares de la villa también fueron descartadas al tener intención de nombrar a un Santo y referirse éstas a Ntro. Sr. Jesucristo, bajo la advocación de Stmo. Cristo de la Sangre o Stmo. Cristo de la Vera-Cruz.
Al año siguiente al sorteo se acordó traer la imagen o escultura de San Jerónimo, dedicándole altar y capilla en la iglesia mayor, terminándose en 1587. La festividad de San Jerónimo fue muy celebrada en la villa durante aquellos años especialmente por los miembros del Concejo de la Villa, pero en el siglo XVIII cayó la devoción al santo y se perdieron la celebración de estas fiestas, y ya a finales del siglo XIX la imagen se encuentra olvidada en el Altar de San Pedro de la Iglesia de Santa María y aquí ha estado hasta nuestros días.
Actualmente el Consejo de Hermandades y Cofradías de Estepa organiza misa y triduo en honor del patrón del "Concejo" cada 30 de Septiembre, festividad de San Jerónimo, en la Iglesia de la Asunción precedida por la imagen del patrón. El Consejo de Hermandades y Cofradías de Estepa instauró en 1989 "el Triduo en honor de San Jerónimo, rescatando así una importante celebración estepeña perdida en los últimos años del siglo XVIII, a la vez que el Consejo asume su patronazgo".