En 1779 la Iglesia de los Remedios es erigida como ayuda de la parroquia de Santa María la Mayor por el Vicario General de Estepa don Domingo Antonio del Portillo.
La Hermandad de Ntra. Sra. de los Remedios fue la encargada de elevar esta petición a dicha autoridad eclesiástica. La Hermandad expuso que la iglesia parroquial se construyó en la fortaleza de la antigua villa cuando ésta estaba habitada y rodeada de casas, pero que debido al fuerte viento y a la incomodidad de la subida, se fue fabricando casas a la falda de la sierra dejando que se arruinaran las que estaban alrededor de la iglesia en el barrio alto, y así quedó la iglesia parroquial en lo alto de la sierra y alejada de las casas del “barrio nuevo”. La Hermandad temía que los feligreses no asistieran a las misas e incluso murieran sin recibir los sacramentos, por lo que propone su sede, donde se venera a la “Soberana Ymagen” de Ntra. Sra. de los Remedios y a la que continuamente “de día y de noche” acuden los fieles de la feligresía “a oir misa, confessar, orar, rezando el Rosario de María Santísima” como “Yglesia Parroquial, filial, theniente o ayuda de la parroquia matriz de Santa María la Maior, colocándose en ella el Santísimo Sacramento”.
El Vicario antes de tomar una decisión al respecto, solicita información de testigos, por lo cual llama a declarar a quince vecinos de Estepa. Todos ellos declaran que tienen a bien y es de justicia que la Iglesia de los Remedios se erija ayuda de la parroquia de Santa María la Mayor.
Además el Vicario toma testimonio a D. Alonso María de Reina, marqués de Cerverales y alcalde por su estado de hijosdalgo, a D. Juan Valderrama, alcalde por el estado general, y al cura párroco de Santa María la Mayor, que se hallaba en Málaga y mandó en su lugar al teniente de cura. Todos ellos expresan su conformidad.
Finalmente pide al alarife Dioniso Pérez un informe del emplazamiento de la Iglesia de los Remedios, en el que constata que la iglesia se encuentra “en medio y centro del barrio nuevo” y la iglesia mayor se encuentra alejada del mismo.
También se registraron detractores de esta propuesta que expusieron que los fieles acudían a los conventos que estaban en la sierra y que, por tanto, también podían acudir a la iglesia mayor. Los detractores temían que la iglesia mayor quedara abandonada y que la parroquia terminara finalmente controlada por la Hermandad de los Remedios, pero el Vicario mandó no hacer lugar a la pretensión de los opositores.
De esta forma, el Vicario don Domingo Antonio del Portillo erige el 6 de noviembre de 1779 “la citada hermita de Nuestra Señora de los Remedios en Yglesia filial, adyutriz o ayuda de la Parroquia Matriz de Santa María la Maior de estta villa”. En consecuencia, mandó que al día siguiente a las tres de la tarde se sacara en procesión al Santísimo Sacramento desde la Parroquia de San Sebastián y se colocara en el sagrario del altar mayor de la Iglesia de los Remedios. Al traslado acudió el vicario, el clero, religiosos de los conventos, el marqués de Cerverales y el Concejo, además de los fieles. Las calles, puertas y ventanas se engalanaron y adornaron, y las campanas de las dos parroquias tocaron a la hora fijada.
El decreto del Vicario permitía que las misas, sermones, entierros y la administración de los sacramentos se celebraran en las dos iglesias, Santa María y los Remedios, pero sin el perjuicio de la iglesia matriz y concediendo a la Hermandad de los Remedios el libre uso de la iglesia filial para celebrar sus funciones como de costumbre hasta ese momento.
Fuente:
-Los orígenes de la Hermandad de Nuestra Señora de los Remedios: Historia de una devoción popular. Remedios González Gamito. V Jornadas sobre Historia de Estepa. 2002