El púlpito estaba coronado por un tornavoz que contenía la siguiente leyenda:
CATH(olica) FID(es) ET RELIG(io) SAC(ra)
VT DEI MAGNAL(ia) QUAE FANT(antur) IN
LOC. IST. FLUANT IN CORD. FIDEL.
QUASI MEL DE PETR. OLEVMQ
DE SAXO.
R.A.P.F.ALEXAND. BARCO ET GARª,(sic)
L.J.S.INQUIS.QUALIF.AC MINIM.
GRANAT(ensis) PROV. PRAES. V.
AMBON.HVNC EX IASPIB(ibus)
De Sua Pecunia Fecit
ANN.CI) D EXI (sic)
Los historiadores han traducido este texto como: “A la fe católica y la sagrada religión / para que las maravillas de Dios que se cuentan en / este lugar fluyan en el corazón de los fieles / como la miel de la piedra y el aceite de / de la roca. / El reverendísimo y piadoso fray Alejandro del Barco y García, / lector jubilado, calificador de la Santa Inquisición, y de los mínimos / corrector provincial de Granada cinco veces, / este ambón de jaspe / hizo a sus expensas / año (…)." El texto fue redactado por el propio padre Barco y está tomado del “Canto de Moisés” del Deuteronomio (32:13).