El taller de don Francisco Buiza estaba justo en frente de la Iglesia de San Juan de la Palma, sede canónica de la Hermandad de la Amargura de Sevilla, lo que propició la buena relación entre la hermandad del Domingo de Ramos sevillano y del Miércoles Santo estepeño. Como curiosidad debemos decir que la Imagen de El Dulce Nombre era trasladada todos los días a este lugar para que pasara allí la noche, después de recibir los trabajos oportunos de restauración. La Hermandad del Dulce Nombre conserva fotografías tomadas en la Casa de la Hermandad de la Amargura. Se puede distinguir con claridad, en el centro, el soberbio techo de palio de la dolorosa sevillana, obra del insigne Juan Manuel Rodríguez Ojeda, junto a la imagen del Dulce Nombre de Jesús.
Una vez restaurada la Venerada Imagen, la Hermandad de La Amargura ofreció Santa Misa, en acción de gracias, en la Iglesia de San Juan de la Palma. En las fotografías se puede apreciar el estandarte o insignia del Dulce Nombre junto a la de la Hermandad de la Amargura. Y en otra foto se ve a nuestro Niño Perdío en el Altar Mayor del referido templo, a los pies del camarín con la dolorosa del Domingo de Ramos acompañada de San Juan.
En otra instantánea se distingue al escultor imaginero don Francisco Buiza Fernández en un ágape de confraternización organizado, después de la Santa Misa, por la Hermandad de la Amargura en las dependencias de su Casa de Hermandad. En dicho acto social se intercambiaron unos presentes en recuerdo de esta entrañable convivencia.
Fotografías de la restauración de 1981:
Fuente:
Boletín “Blanca y Colorá” 2012