Además, sus vestidores y camareras han ataviado a la Señora en esta ocasión con la saya bordada en oro sobre tisú de plata realizada en 1893 por las Hermanas Antúnez, además de su espléndido juego de joyería antigua, compuesto de brillantes, diamantes y esmeraldas, considerado uno de los más valiosos de la provincia. Ha portado en sus manos un ramo de talco realizado con nácar y piedras de ágata, llevando así mismo su magnífica corona y algunas joyas de su ajuar como la Medalla de Oro de Estepa o los broches regalados por la Hermandades de nuestra Ciudad. En su cintura ha lucido el fajín del General Díaz Luque y un broche de filigrana cordobesa recientemente restaurado.
Los cultos en su honor comenzaron el día 6 de agosto y ha bajado así de su camarín para la veneración de los fieles del día 13 de agosto.
Las Madres Clarisas, grandes devotas de la Patrona, han permitido con esta cesión que el pueblo de Estepa pueda contemplar una de las grandes joyas de su convento, como también tuvieron a bien ceder otro manto para la entrega de la Medalla de la Ciudad a la Virgen.
Fotografías e información: Hdad. de la Asunción