Las Órdenes Terceras o Terciarias son agrupaciones de seglares o laicos que se comprometen, mediante voto personal, a seguir una regla establecida para ellos por las diferentes órdenes religiosas, participando así, en la medida de sus posibilidades, de la vida de estos institutos religiosos. Se dedican al apostolado y buscan la perfección cristiana bajo la alta dirección de estos institutos. El nacimiento de estas corporaciones era alentado por las propias órdenes religiosas, sin duda para aumentar su influencia en las ciudades y villas en que realizaban sus fundaciones. De esta forma, las Órdenes religiosas contaban con Órdenes terceras para los seglares además de su correspondiente rama masculina (primera orden) y femenina (segunda orden).
San Francisco de Asís fue el primero en integrar a partir de 1212 en la Orden franciscana a seglares sin que tuvieran obligación de abandonar su estado de vida, fundando la Orden Tercera en 1221. Con esa misma idea y con la aprobación pontificia, se sumaron más tarde los dominicos (1406), los agustinos (1409), los servitas (1424), los carmelitas (1452), los mínimos (1508), los trinitarios y premostratenses (1751).
La regulación canónica establece en la Iglesia tres clases de asociaciones para los laicos: terceras órdenes seculares, cofradías y pías asociaciones; estableciendo, al tratar del orden de precedencia, una cierta jerarquía entre ellas, puesto que prescribe que precedan las Órdenes Terceras a las demás asociaciones. La agregación de una asociación de seglares a una Orden Terciaria necesita el consentimiento del Ordinario local, así como una licencia especial del mismo Ordinario para usar sus vestiduras en las funciones sagradas públicas. La asociación, llamada entonces “Hermandad de Terciarios”, puede gozar de personalidad jurídica independiente a la Orden correspondiente, y por medio de esta personalidad, también personalidad civil. El Superior de una Orden puede también inscribir a personas particulares.
En Estepa la llegada de las Órdenes religiosas se produjo a raíz de la venta por Carlos I de los territorios de la Encomienda Santiaguista a la familia de banqueros genoveses Centurión en 1559, cuyo hijo sería nombrado Marqués de Estepa. Los Centurión apoyaron la fundación de conventos en la villa en la segunda mitad del siglo XVI y con el establecimiento de estas Órdenes se fundan las Órdenes Terciarias para los seglares de Estepa en sus conventos (mínimos y franciscanos). En la segunda mitad del siglo XVIII se fundarían dos nuevas Órdenes Terceras (servitas y carmelitas) pero esta vez correspondía a iniciativa particular y no a la de una orden religiosa.
1. VOT de los mínimos
El nacimiento de la Orden Tercera de los mínimos se sitúa en el año 1501 a iniciativa del fundador San Francisco de Paula (1416-1507) y fue aprobada en 1508. La fundación del convento mínimo de Estepa data del 2 de febrero de 1562, siendo el primero y más antiguo de la villa, y probablemente poco después se establecería la correspondiente orden tercera para los seglares. Tenía capilla propia en la iglesia conventual, dedicada a San Francisco de Sales, patrono de dicha orden tercera.
2. VOT de los franciscanos
La Orden Tercera franciscana fue fundada en 1221 por San Francisco de Asís y aprobada por Nicolás IV el 18 de agosto de 1289, modificada por León XIII el 30 de mayo de 1883 y por Pablo VI el 24 de junio de 1978, que la transformó en la Orden Franciscana Seglar. En Estepa el convento de madres clarisas fue fundado el 10 de enero de 1599 y el de franciscanos en 1602, aunque hubo un intento anterior en 1590. El primer documento que hace referencia a la Orden Terciaria franciscana es de 1686, en que comienza el más antiguo de los libros que se conserva de esta corporación, aunque su existencia es anterior. Debió establecerse tras la fundación del convento franciscano de Estepa allá por los primeros años del siglo XVII. A esta orden tercera pertenecieron, e incluso ejercieron como sus hermanos ministros, algunos de los más destacados miembros de la familia Centurión, como don Juan Bautista, séptimo marqués de Estepa, que fue ministro de la corporación entre 1740 y 1743, y lo mismo su esposa, doña María Luisa Centurión, en la sección femenina de la misma. En 1809 todavía había profesiones de miembros de la congregación y en 1870 hay testimonios documentales que avalan su existencia a pesar del cierre del convento estepeño en 1835.
3. VOT de los servitas
En 1424 la Orden Seglar de los Siervos de María fue reconocida por el Papa Martín V, siendo la actual Regla de 1995. El VOT de Servita de Ntra. Señora de los Dolores de Estepa fue fundada a iniciativa del vicario don Manuel Bejarano y Fonseca, gran devoto de esta advocación mariana. La patente de erección de esta orden tercera fue dada por el prior general de la Orden de los Siervos de María en el convento de San Marcelo de Roma el 4 de enero de 1765; la fundación tuvo lugar en la capilla de la Virgen de los Dolores sita en la ermita del hospital de la Asunción de Estepa, nombrándose como fundador el mencionado vicario general. El documento más antiguo es un libro de asiento de hermanos que comienza en 1790, cuando se hizo cargo de la corporación el presbítero estepeño don Diego de Vergara, y acaba en 1816. Los Servitas desearon controlar la “Obra Pía del Pecado Mortal”, que era una institución religiosa dedicada a pedir limosnas para fines caritativos y cultos, e incluso deseaban absorber a la Hermandad de San Pedro. Esto produjo un pleito que comienza en 1765 y un conflicto judicial en 1799, pero que no se resolverá hasta principios del XIX con la unión de ambas corporaciones. En enero de 1816 el presbítero don Antonio Fernández Borrego, último de los comisarios de la cofradía, decide entregar los documentos al curo párroco de Santa María para su conservación. El último rastro documental que se conserva de la corporación es un escueto inventario de los bienes de la misma realizado en 1830. La fiesta principal se celebraba el Viernes de Dolores, con una novena en el altar de la Virgen en su capilla. El Domingo de Ramos por la tarde salía procesionalmente la imagen acompañando la estación de penitencia de San Pedro y el Cristo de las Penas.
4. VOT de los carmelitas
La Orden Tercera de los carmelitas fue aprobada en 1452. A finales del siglo XVI, la Orden pretendió convertir la Ermita de la Vera Cruz en su convento (16 de mayo de 1597), pero la fundación no fue posible a pesar de contar con el consentimiento del marqués Juan Bautista Centurión. En 1744, fray Nicolás María Richiuti, general de la Orden del Carmen, fundó la cofradía de Ntra. Sra. del Carmen con la aprobación del vicario en la Ermita del Cristo de la Sangre. El establecimiento de la Venerable Orden Tercera de Nuestra Señora del Carmen, miembros laicos de la antigua observancia, se realizó a petición de don José de Silva y algunos vecinos de Estepa, quienes obtuvieron facultad para su erección del prior general de la orden carmelitana, fray Roque Melchor, fechada en 30 de diciembre de 1800. El vicario, a la sazón don Pascual Fita, por su parte, concedió su licencia el 3 de marzo de 1801, siendo aprobadas sus constituciones en 24 de abril de ese mismo año. Parece que esta institución tuvo una efímera vida pues consta, por un inventario de los bienes y efectos de la ermita del Carmen realizado en 1835, la existencia de un libro de las constituciones que conserva y capítulos que celebra el Orden Tercero de Ntra. Sra. del Carmen, que principia en el año 1801 y acaba en septiembre de 1828.
Artículos y libros consultados:
-Hermandades, cofradías y otras corporaciones religiosas no penitenciales en la Estepa de la Modernidad. Jorge Alberto Jordán Fernández. Miscelánea Ostipense. Estudios sobre historia de Estepa. 2013
-Las órdenes religiosas en la Vicaría de Estepa (siglos XVI al XVIII). José María Miura Andrades. Actas del IV Jornadas sobre Historia de Estepa. Ed. Ayto. de Estepa, 2000.
-El patrimonio de los conventos estepeños: Propiedades y rentas. Joaquín Octavio Prieto Pérez. Actas del IV Jornadas sobre Historia de Estepa. Ed. Ayto. de Estepa, 2000.
-Clausura. Monasterio de Santa Clara de Jesús. Ed. Ayuntamiento de Estepa, 1999
-Primer Simposio. Cuatro siglos de presencia de los franciscanos en Estepa. Ed. Iltmo. Ayto. de Estepa. 2003
-Memorial Ostipense, de Antonio Aguilar y Cano, 1975. Reedición.
-La antigua Ostippo y actual Estepa, de Padre Alejandro del Barco. Reedición de A. Recio Veganzones. Ed. Iltmo. Ayto. de Estepa, 1994.
-Las Órdenes religiosas en Estepa. Devociones de Estepa. 2015