14/5/20

LA CRUZ COLORÁ

La crucifixión de Jesús, y a su vez la Cruz que cargó y en la que fue crucificado, es el símbolo del sacrificio de Jesús por la salvación de los hombres, de ahí que sea el símbolo que representa a los cristianos. El Crucifijo se representa en todo tipo de materiales y tamaños, desde pequeñas joyas a grandes esculturas. En las iglesias se encuentra como parte destacada del altar mayor, ante él, o como parte de algún otro retablo. En el espacio urbano podemos encontrarlas en las cercanías a una iglesia o en un cruce de caminos, como resquicio de un antiguo cementerio o recuerdo de un altercado desdichado. En Estepa encontramos la Cruz en el interior de las iglesias y las ermitas, en piezas de orfebrería y de madera tallada, como parte de los retablos mayores o laterales, de forja en las espadañas, en los remates de las torres y en las cercanías a los lugares de culto, y también de piedra para señalar un desafortunado incidente en un cruce de caminos. Es evidente, además, que algunas de nuestras cofradías tienen entre sus titulares a Cristo Crucificado.

La Cruz, como menciona Aguilar y Cano en su Memorial Ostipense de 1886, da nombre en Estepa a varias calles. Una de ellas correspondería a la calle Vera Cruz en el arrabal en el que se había levantado la ermita homónima de la Vera Cruz. La otra calle estaría en el arrabal opuesto, junto a la puerta de la Coracha, la cual correspondería con la actual calle Cruz. Aguilar y Cano recoge que esta calle era llamada con anterioridad como Calle Cruz Colorada, e incluso Calle Cruz Verde. La utilización de un color para denominar a la Cruz no es un simple hecho de apreciación sino que conlleva un significado relacionado con la propia historia de Estepa.

En numerosos pueblos se puede encontrar en la actualidad una calle entre su nomenclátor que hace referencia al color “colorado” para llamar a la Cruz. Esta mención es una clara distinción a la Orden religiosa que estuvo encargada del pueblo o de la ciudad tras la reconquista, correspondiendo o bien a la Orden de Santiago, o bien a la Orden de Calatrava. En concreto, Estepa estuvo bajo la gobernanza de la Orden de Santiago durante casi trescientos años.

El 24 de septiembre de 1267 el rey Alfonso X el Sabio entrega la villa de Estepa y sus anexos a la Orden de Santiago. Hasta 1559, la orden está presente en la villa conservándose interesantes vestigios santiaguistas de carácter civil como el recinto amurallado (S. XIII-XVI) y la Torre del Homenaje (h. 1390), o de carácter religioso como la Iglesia de Santa María y numerosas ermitas extramuros, algunas de ellas dedicadas a Cristo Crucificado, como la ermita del Cristo de la Vera Cruz y la ermita del Cristo de la Sangre. En algunas de estas ermitas se podía observar en su fachada principal la Cruz de Santiago decorada con veneras, así se tiene constancia que era la fachada de la ermita de la Vera Cruz.

La Cruz Colorada en Estepa se mencionaba para indicar la relación de Estepa con la Orden de Santiago, nombrada en honor a Santiago el Mayor, Patrón de España, a través de la Cruz que la Orden tenía como emblema. La Cruz de Santiago es una cruz latina de gules, es decir de color rojo, que simula una espada, con los brazos rematados en flor de lis y una panela en la empuñadura. En el estandarte de la Orden aparece además la venera en el centro y al final de cada uno de sus brazos. La forma de la Cruz tiene su origen en la época de las Cruzadas, cuando los caballeros llevaban pequeñas cruces con la parte inferior afilada para clavarlas en el suelo y realizar sus rezos diarios. La Cruz, en forma de espada, representa el carácter caballeresco del apóstol Santiago, quien fue martirizado con esta arma, y las flores de lis hacen referencia al rasgo moral “sin mancha” del Apóstol. La Cruz de Santiago es el emblema de la Orden de Santiago desde el siglo XII, portada por sus caballeros en su estandarte y en su capa blanca.

La calle Cruz o Cruz Colorada indica además la dirección hacia uno de los términos de Estepa que llevan el nombre del patrón de la Orden de Santiago, en concreto es un nacimiento de agua en la falda de la sierra de Estepa, al este, y cuyo cauce se forma después en dirección a Lora de Estepa en el arroyo llamado también “de Santiago”, que va a parar al Río de las Yeguas, afluente del Río Genil. Nos referimos a la Fuente de Santiago, cuyos terrenos cercanos toman el nombre de la fuente desde muy antiguo, posiblemente por los trabajos encargados por los comendadores santiaguistas para el aprovechamiento de las aguas del manantial en su término.

Cabe destacar que Aguilar y Cano menciona también la Calle Verde, la cual, como emblema de la Inquisición Española, alude al lugar donde se celebraban los autos de fe y ejecuciones de la Inquisición. La Cruz era llevada por familiares y otras personas en procesión hasta el sitio en el que se iba a realizar la ceremonia, y después se devolvía en procesión hasta su iglesia de origen. En Estepa, a pesar de que la Inquisición tuvo sede en la calle Castillejos cerca de la casa del Vicario, no parece que se pueda vincular esta Cruz Verde con la institución dado que la mayoría de los casos de acusaciones se resolvían en ciudades de mayor población, como fueron los actos a judíos en Córdoba.

La Cruz Verde estepeña puede referirse al símbolo de las cofradías que honraban a la Verdadera Cruz, es decir, la Cruz Verde de las cofradías de la Vera Cruz, que en Estepa tenía su sede en el arrabal oeste del pueblo. La Ermita de la Vera Cruz fue levantada en época de la Orden de Santiago y aunque se desconoce la fecha de la fundación de la cofradía de la Vera Cruz, el primer libro de cabildos que se conserva data de 1566 y recoge datos de los oficiales desde 1563. La fundación de la cofradía sería anterior y se fecha hacia 1536. La calle Cruz Verde o Calle Vera Cruz estaría, por tanto, en el arrabal opuesto a la Cruz Colorada del emblema santiaguista.





Por último, quisiéramos señalar que esta Cruz Colorá y Cruz Verde cuyas referencias datan del siglo XV y XVI no se pueden confundir con las actuales Cruz Roja y Cruz Verde que nos encontramos habitualmente en nuestras calles y cuyas historias comienzan en el siglo XIX. La Cruz Roja es un movimiento que surge en 1863 de la mano del suizo Henri Dunant y cuya nacionalidad dio imagen al movimiento, al invertir los colores de la bandera suiza, la Cruz griega de color roja en fondo blanco, convirtiéndose en un símbolo de la salud y de ayuda a los necesitados. En Francia, sin embargo, se prohibió el símbolo de Henri Dunant y se cambió el color de la cruz al verde, por su relación con la naturaleza, la esperanza o las plantas utilizadas en las preparaciones medicinales, utilizándose como emblema por los proveedores de salud y las boticas.

Las calles de Estepa llevan en su nombre los acontecimientos principales de nuestro pueblo, como ocurre con la calle Cruz o Cruz Colorá y su relación al emblema de la Orden de Santiago, o la calle de la Verdadera Cruz junto a la antigua ermita santiaguista de la Vera Cruz. Dos calles y dos cruces que son vestigios del pasado santiaguista de Estepa.

Libros y artículos consultados:
-Memorial Ostipense. Aguilar y Cano, A. 1886.
-El callejero cofrade estepeño. Devociones de Estepa. 2019
-Retablos callejeros de Estepa. Devociones de Estepa. 2017
-La cofradía de la Santa Vera Cruz de Estepa. Devociones de Estepa. 2015
-Estepa santiaguista. Devociones de Estepa. 2011