23/5/17

CHURRETERO, EL ORIGEN DEL TÉRMINO A DEBATE


Cualquier estepeño ha crecido conociendo el término “churretero” para designar a los vecinos que viven en la zona oeste del pueblo, cercanos a la Iglesia de Ntra. Sra. de los Remedios, en cuya Virgen se aglutina la principal devoción del barrio. La vinculación de los churreteros con su Virgen y con las otras imágenes de la iglesia es innegable, y así forma parte de la identidad del barrio. El término “churretero” está en relación con el término “mondonguero”, que designa al resto del pueblo y cuya principal devoción representativa del barrio es la Virgen del Carmen. Esta relación se basa en una “oposición o rivalidad histórica” entre los dos barrios. Estas referencias son aceptadas por la mayoría de los estepeños. Sin embargo, se discrepa en cuanto al origen de los términos y el modo en el que llegó a aplicarse a su vecindario. En los siguientes párrafos proponemos un estudio histórico de los dos barrios y una recopilación de todas las explicaciones que se han dado sobre ambos para intentar arrojar algo de luz sobre el origen.

La primera fecha a tener en cuenta es la vuelta del cristianismo a Estepa tras la conquista de la villa por el rey Fernando III el Santo en febrero de 1241, quien se la entregó desde esta fecha a su hermano el infante Alfonso de Molina. Con posterioridad el 24 de septiembre de 1267 el rey Alfonso X el Sabio cedió el castillo de Estepa y sus anexos a la Orden Militar de Santiago, que se mantuvo en el control de la villa hasta la venta de la misma a la familia de los Centurión en 1559. En estos cerca de tres siglos se debe entender que la villa no fue todo el tiempo cristiana, debido a su cercanía con el reino de Granada y a las incursiones constantes de los moros en estas tierras. Puede citarse como ejemplo el saqueo que el príncipe heredero de Granada Muley Alohasen mandó sobre la villa en 1461. Los habitantes ante esta situación se sentían inseguros para salir fuera de los muros de la villa por la precaria seguridad que suponía vivir allí, pero es con motivo de este saqueo que se menciona los primeros arrabales asentados en las faldas del cerro. Estaríamos hablando del barrio que se forma en torno a la calle Ancha, nuevo centro del pueblo, la calle Vera-Cruz y la actual Plaza Poley. En estos lugares se levantan las antiguas ermitas de San Sebastián, la Vera Cruz y Santa Ana, en torno a los cuales se formarían los barrios.

A mediados del siglo XVI la ermita de San Sebastián con el apoyo del Concejo de la villa pide que se le conceda el status de parroquia independiente de la de Santa María de la Asunción. En esta división se vio involucrado el poder político y religioso de la villa, representado por la parroquia de Santa María y la Vicaría, y las nuevas parcelas de poder que representaba el Concejo. En 1541 Carlos I permite que en la villa hubiese dos parroquias, iniciando un largo proceso de pleitos. En 1559 el Prior de San Marcos de León accede a la división pero no se hace efectiva al pasar la villa a manos de los Centurión. En 1562 Felipe II ordena que se cumpla la división, pero la parroquia de Santa María apela al Papa, siendo nombrado Juez Apostólico el Arzobispo de Sevilla. Finalmente se resuelve el conflicto por una breve del Papa Pío IV que accede a la división. Estas dos décadas y media de separación y conflicto entre los partidarios de los dos lados hizo una mella considerable en la feligresía estepeña. Las parroquias tuvieron que deliberar la separación de los feligreses según las calles del pueblo, creándose por primera vez una “rivalidad” entre la Parroquia de Santa María y la de San Sebastián, pero a su vez formándose la identidad de barrio en torno a las parroquias.





La siguiente prueba de esta confrontación se vivió a finales del siglo XVII y durante el siglo XVIII cuando se extendieron en la villa de Estepa las hermandades y cofradías del Santo Rosario: Remedios, Carmen, Asunción y Concepción. Dos de estas hermandades representaban principalmente a sus feligresías y a sus parroquias: Remedios a la parroquia de Santa María y Carmen a la parroquia de San Sebastián. El 22 de noviembre de 1701 se funda la Cofradía del Rosario de María Santísima de los Remedios en la Ermita de la Vera Cruz y el 2 de junio de 1702 se funda la Hermandad del Santo Rosario de Nuestra Señora del Carmen en la Ermita del Santo Cristo de la Sangre. Las dos hermandades se unieron a las originarias de las ermitas, Corpus Christi en 1728 y Vera Cruz en 1733, encargándose además de la ampliación de las ermitas y su decoración. Los dos barrios celebraban con gran esplendor las fiestas en honor a María Santísima. Los devotos de ambas imágenes, dejándose llevar por el fervor, se criticaban los unos a los otros por los festejos y la celebración de las fiestas, y de esta forma surgieron términos despectivos para referirse los unos a los otros. Los dos términos fueron “churreteros”, en referencia al barrio oeste y a la Hermandad de los Remedios, y “mondongueros”, en referencia al barrio este y a la Hermandad del Carmen.

El origen del término “mondonguero” no se presta a dudas y se relaciona con el mercado de la calle Mesones y la actividad socioeconómica del barrio. Los vecinos comerciaban con las morcillas, chorizos y carnes de las matanzas, por lo que les llamó “mondongueros”, que se refiere a las tripas, vísceras y carnes del cerdo y otros animales. Este negocio era rentable en el barrio y se les consideraba el barrio más pudiente de la villa. En contrapartida surgió el término “churretero” para designar a los del barrio oeste, siendo el barrio más pobre de la villa y en el que ‘más sucios’ estaban los vecinos. El barrio era de agricultores y ganaderos, de trabajadores en el campo y la sierra, refiriéndose el término a la suciedad de sus ropas o churretes. También se habla de carboneros o piconeros con el mismo sentido. Los dos términos, en su origen despectivos, llegaron a identificarse con los barrios y con las principales Hermandades marianas que habían en sus iglesias. Por este motivo, se convirtieron en motivo de honor y orgullo del barrio al quedar identificadas con la Virgen que había en sus ermitas. Como testimonio de la “rivalidad” existente de los dos barrios se puede citar las coplillas que Antonio Aguilar y Cano recogió en las Anécdotas de su Memorial Ostipense a finales del siglo XIX. De esta confrontación no queda nada más que el amor a María Santísima en los dos barrios, que están hoy en día bien avenidos.



Esta explicación del término “churretero” parece ser la más lógica, pero el origen del término es muy discutido y algunos autores defienden que es de más antigüedad, remontándolo incluso a la época de la Orden de Santiago.

Una de las atribuciones menos probables del término “churretero” tiene que ver con la costumbre de acicalar las fachadas de las casas con la llegada de la Octava de Ntra. Sra. de los Remedios. Las casas se encalaban con la cercanía de las fiestas, pero al no estar las calles adoquinadas sino con terrizos, se ensuciaban con la caída de las primeras lluvias. De esos churretes que se formaban en las fachadas se defiende que proviene el término de “churretero”. Está relación, fruto de la tradición oral, es poco probable pero clarifica también la relación del término con el barrio y sobre todo con Ntra. Sra. de los Remedios. Dejemos en este momento también claro que el término no tiene ninguna relación con la palabra “churros”, ni con las personas que se dedican a realizar este producto, a los que antiguamente se les llamaba “jeringueros”.

La explicación que une a la palabra “churretero” con la Orden de Santiago ha sido defendida por estepeños tan ilustres como D. Rafael Romero Jiménez. Sostiene que la palabra “churretero” se aplicó desde hace mucho tiempo a una profesión. Esta profesión era la de pastor o cuidador de un tipo de oveja en concreto. La oveja se conocía como “oveja churra”, perteneciente al tronco español “Ovis aries celticus”, raza autóctona ovina de Castilla y León, siendo una de las razas primitivas de nuestra península ibérica. Con la llegada de los caballeros de la Orden de Santiago a Estepa, en su mayoría procedentes de León y de la cornisa cantábrica, los repobladores trajeron este término para designar a los pastores, con el significado de “labriego o labrador”.

Asegura que no sólo llego el término a asentarse entre los pobladores del barrio oeste, sino que también pudo llegar algún ejemplar de este tipo de oveja. Tras la conquista de las tierras del Sur por el rey Fernando III el Santo, era costumbre que los rebaños ocuparan los lugares conquistados para invernar e ir alimentando a los animales con los pastos de climas más templados, siendo tal la importancia que tomó el ganado ovino procedente de Castilla y León, así como la exportación de la lana y la fabricación de paños castellanos. Para asegurarse del cobro del tributo a los rebaños a su paso por los territorios de realengo, Alfonso X el Sabio fundó en 1273 el Honrado Concejo de la Mesta, y en las villas las mestas locales para autoprotegerse ante los ataques de la época. Los pastores de ovejas churras fundaron la Mesta Local de Churreteros. Con la llegada de los Centurión llegó otra raza de oveja procedente de Génova conocida como merina, pero el término para designar a los pastores y a los vecinos del barrio se quedó.



Esta explicación situaría al término “churretero” en la Estepa posterior a la conquista para designar a los pastores. Su vinculación con la Orden de Santiago coloca el uso del término entre 1267 y 1599, pero su relación con el barrio oeste sería en los últimos años del dominio de la orden. En esta explicación quedaría fuera uno de los más importantes baluartes del término “churretero”, que comprende a la devoción a Ntra. Sra. de los Remedios. Para relacionar la unión del término “churretero” con la Virgen no podemos adelantarnos a finales del siglo XVII y al siglo XVIII, fechas que corresponden con el auge de la devoción y el esplendor de la Hermandad en el barroco. El término existiría para designar a los habitantes del barrio y se vincularía a la Virgen del barrio con el auge de la Hermandad rosariana. Es en esta vinculación donde jugaría un papel destacable la “rivalidad” anteriormente comentada y relacionada con las hermandades de los Remedios y del Carmen. En las coplillas del siglo XIX se les llama ‘pobres y sucios’ a los habitantes del barrio oeste, por lo que la relación del término “churretero” con la palabra sucio o churrete no está tan alejada, pudiendo adquirir un nuevo significado. De igual forma se le acusa a los del barrio este de ‘aparentar algo que no son’. La rivalidad era así una realidad entre ambos barrios y se relacionaba con sus devociones particulares a María Santísima. Los términos “churreteros” y “mondongueros” tuvieron en este momento un matiz peyorativo, pero acabaron siendo aceptados y reafirmados por sus barrios. Atendiendo a esta defensa del término “churretero” con origen medieval, estaríamos llamando a la Virgen de los Remedios con el término de “churretera” como Virgen de los Pastores, lo que adquiere una mayor dimensión de la devoción a nuestra Virgen como Pastora celestial de los hombres.

En este primer análisis del término “churretero” queda pendiente por confirmar varios datos históricos importantes. Primero, saber si existió una cabaña considerable de ovejas churras en la villa medieval de Estepa. Y en segundo lugar pero más importante y esencial, cuándo aparece por primera vez el término de “churretero” en los documentos que tienen relación con la villa de Estepa. Sea como sea, lo que es indiscutible hoy es que Ntra. Sra. de los Remedios es el eje motor principal del barrio que acepta el término “churretero” para designarse; barrio que la aclama a Ella y a su Divino Hijo con el mismo nombre. Bendito es, sin duda, el nombre de la Señora.

Artículos consultados:
-Estepa. Nueva colección de documentos, datos históricos, noticias bibliográficas y biográficas, anécdotas, etcétera, referentes a la citada ciudad. A. Aguilar y Cano. Imprenta Hermoso. 1891.
-Aproximación a la forma urbana de Estepa. A. del Pozo y Barajas, F. Torres Martínez, G. Pavón Torrejón y JJ Frau Socías. Actas III Jornadas sobre Historia de Estepa. 1998.
-La conquista de Estepa por el rey Fernando III, el Santo. Devociones de Estepa. 2009
-Donación del castillo de Estepa a la Orden de Santiago. Devociones de Estepa. 2009
-Estepa Santiaguista. Devociones de Estepa. 2011
-Arrabal de San Sebastián. Devociones de Estepa. 2010
-La división de las parroquias. Devociones de Estepa. 2010
-Los rosarios públicos, estandarte y faroles. Devociones de Estepa. 2016
-Hermandades del Rosario en Estepa. Devociones de Estepa. 2009
-Archicofradía y Hermandad del Corpus Christi y Ntra. Sra. del Carmen. Devociones de Estepa. 2016
-Mondongueros. JM Díaz Fernández. Iglesia de San Sebastián: el renacer de un templo. Iltmo. Ayto. de Estepa. 2010
-Hermandad de Ntra. Sra. de los Remedios. Devociones de Estepa. 2016
-Las leyendas de la Virgen de los Remedios. Devociones de Estepa. 2016
-Churreteros. Devociones de Estepa. 2016