10/9/13

LA INSPIRACIÓN DE BUIZA PARA SUS DOLOROSAS

Las Dolorosas de Francisco Buiza presentan rasgos comunes que las hacen ser identificadas fácilmente, como los ojos negros y rasgados, los labios carnosos y entreabiertos, dejando ver la lengua y los dientes perfectamente tallados, los pómulos abultados o el cuello contraído. No obstante, en sus obras se aprecian también rasgos que son fruto de su estudio sobre las grandes Dolorosas del barroco sevillano y de la maestría aprendida en el taller de Sebastián Santos.


Buiza se encargaba de realizar vaciados en el taller de Sebastián Santos, donde estuvo trabajando desde 1946 a 1952. Su buena relación con el maestro le hace adoptar algunos rasgos de las obras de Sebastián Santos que son apreciables en sus primeras obras. Las Dolorosas presentan más frontalidad, suaviza la expresión de dolor y los rasgos están más modelados. Como ejemplos de las grandes Dolorosas realizadas por Sebastián Santos podemos citar a la Virgen del Refugio (1938), la Concepción (1954) y los Dolores (1955) de Sevilla.


Dolores del Cerro (Sevilla) - Dolores en su Soledad (Lora del Río)

En 1952 Buiza establece su propio taller en la calle Viriato e inicia la evolución hacia un estilo propio que caracterizará sus obras. Buiza apuesta por el neobarroco, de ahí que sus Dolorosas muestren la fuerza de su carácter y se acerquen al dramatismo, el realismo casi naturalista. Sus Dolorosas se distinguen por sus grandes ojos negros y rasgados, labios carnosos, con la lengua y dientes tallados, y la expresión de bellísimo dolor compungido. Buiza está influenciado por las grandes Dolorosas de la Semana Santa sevillana, especialmente por la Estrella, la del Valle, la Victoria o la Macarena.

La Esperanza Macarena fue un referente durante toda su obra y muestra algunos de sus inconfundibles rasgos en sus Dolorosas, como en Mª Stma de la O (1970) de la Hermandad de los Gitanos de Málaga. La Macarena se caracteriza por la asimetría en su rostro, la cabeza recta y la mirada dirigida levemente hacia el suelo. Sus cejas arqueadas, acompañadas de los párpados hinchados y las mejillas enrojecidas. Su boca entreabierta muestra la lengua hacia adelante y los dientes superiores tallados.
Esperanza Macarena (Sevilla) - Mª Stma de la O (Málaga)

Como restaurador su trabajo le permitió el estudio más detallado de grandes imágenes, así pudo tener en su taller a la Virgen de la Amargura en 1973, Rosario de Montesión en 1976 y la Victoria en 1978. En estas imágenes Buiza se encarga de su conservación, sin realizar un cambio estético de las mismas. En cambio, sí realiza una intervención más profunda en la Virgen del Socorro en 1967 y en la Virgen del Rocío, en las que retalla la imagen y cuya fisonomía actual prácticamente desde entonces se puede atribuir al imaginero de Carmona. La Virgen del Rocío adoptará también rasgos macarenos.


Virgen del Socorro (Sevilla) - Virgen del Rocío (Sevilla). Restauraciones


Para realizar la imagen de Mª Stma de la Trinidad de Cádiz en 1967, Buiza busca las pautas marcadas en la Virgen de las Aguas de la Hermandad del Museo y en la Virgen de los Dolores y Misericordia de Antonio Eslava, aunque Buiza imprime su toque personal, introduciendo los grafismos que se repetirán en toda su producción. La imagen eleva su afligida mirada al cielo en actitud implorante, inclinando levemente el rostro hacia el lado derecho. El óvalo facial queda enmarcado en una trabajada cabellera tallada, peinada al centro y recogida en un moño bajo que deja parcialmente visibles las orejas. Presenta pestañas postizas y cejas muy marcadas.



Aguas (Sevilla) - Trinidad (Cádiz) - Dolores y Misericordia (Sevilla)

Esta iconografía de Mª Stma. con la mirada al cielo consigue llevarla a su estilo en Santa María de la Caridad (1971), Ntra. Sra. del Amor (1971) y Ntra. Sra. de la Estrella (1980).


Caridad - Amor - Estrella

No se puede dudar también de la influencia de las Dolorosas del escultor murciano Francisco Salzillo en la realización de sus Dolorosas. Sus rasgos se muestran en Ntra. Sra. de la Luz de la Hermandad de las Aguas de Cádiz (1982), basada en una imagen de procedencia italiana del siglo XVIII que poseía la Hermandad.
Dolores de Salzillo
 Ntra. Sra. de la Luz de Buiza
En 1978, Buiza tiene la oportunidad de tener en su taller a una de las Dolorosas que más apreciaba. La Virgen de la Victoria de la Hermandad de las Cigarreras dejó profunda huella en el artista y probó en su taller reflejar sus rasgos en las Dolorosas venideras. Buiza finalizó dos Dolorosas en 1979 sin haber recibido encargo alguno, sino por la necesidad creativa de volcar sus sentimientos y expresar sus emociones. Fruto de este trabajo resultaron Mª Stma. del Rosario de Cádiz y Ntra. Sra. de la Paz de Estepa, que serían adquiridas por sus hermandades cuando visitaron el taller de Buiza. La Virgen inclina la cabeza hacia la derecha y mantiene baja la mirada, presenta ojos y pómulos muy enrojecidos debido al llanto, los párpados caídos y la boca entreabierta como emitiendo un dramático lamento.

Virgen de la Victoria (Sevilla)



Rosario de Cádiz - Paz de Estepa

Fuente:
-Francisco Buiza Fernández: el genio de la madera. AJ Fernández González. Hdad del Dulce Nombre. 2013
-La obra del imaginero Francisco Buiza FernándezFelipe Bermudo. Cofrades. ABC. 2011
-Francisco Buiza: un recorrido fotográfico por todas sus obrasBlog sobre Francisco Buiza.
-Francisco Buiza: la gubia de la pasión (1), (2), (3) Blog de los Angelistos. 2011
-Semblanzas: BuizaLa Hornacina.