En 1640 Francisco Centurión, Marqués de Almunia, dona a la iglesia parroquial de Santa María del relicario del Lignum Crucis, considerada obra bizantina de la segunda mitad del siglo XII y la pieza extranjera más antigua que se conserva en Estepa. Junto al preciado Lignum Crucis, Francisco Centurión donó a la parroquia una cruz de oro con una espina de la Corona de Jesucristo; algunos fragmentos de San Floro, San Domno, San Adaucto y San Antistio y el cuerpo de San Luciano, protomártir de Cerdeña, en una rica y elegante urna. Ante la presencia de la reliquia de la urna que contenía el cuerpo de San Luciano, la iglesia estepeña instauró como festividad el 28 de mayo, fecha del martirio del Santo. San Luciano fue discípulo del apóstol Santiago y San Pablo, de quien escuchó el primer anuncio del Evangelio, y de San Pedro, que lo bautizó. Fue perseguido durante el gobierno de Nerón y condenado junto a los santos Félix, Príamo y Emilio en Cerdeña, en donde predicó el Evangelio. Fue martirizado y atravesado por una lanza, según ordenó el juez de su proceso, el 28 de mayo del año 69. Se les conmemora en el Martirologio Jerominiano y en otros martirologios. Cabe la peculiaridad de que la ciudad de Cagliari en Cerdeña afirma haber descubierto y tener depositados sus restos en la cripta de la catedral.
La reliquia de San Luciano, acompañada de una canilla de San Restituto, mártir de Cerdeña, y otras reliquias, fueron entregadas en un primer momento en 1640 al abad mayor de la cofradía de Venerables Sacerdotes de San Pedro para la capilla dedicada a Jesús Nazareno, pero acabaron en la Iglesia de Santa María.
En los inventarios de la Iglesia de Santa María aparecen las reliquias de San Luciano junto a las de San Inés expuestas en el retablo mayor. El lugar que ocupaba la reliquia de San Luciano tiene la siguiente inscripción: “S. Luciani Apostolorum aetate Mart. Corpus venerandum quod Franciscus Centurionis de Corduba Joannis Marquionis de Estepa F. L. Munae Marquio. Ostiponensibus dedit anno Christi MDCXXXIX”. (“Venerado cuerpo de San Luciano, mártir del tiempo de los Apóstoles, que Francisco Centurión de Córdoba, hijo de Juan, Marqués de Estepa, Marqués de Armuña, dio a los estepeños en el año de Cristo de 1639”).
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| Los relicarios en el retablo mayor |
Actualmente la reliquia de San Luciano se conserva en la parroquia y su urna se exhibe en la Iglesia de Santa María.
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